martes, 19 de mayo de 2009

La jura de Santa Gadea y el Cid Campeador

Hoy hemos visto el episodio de la Jura de Santa Gadea, cuando el Cid se enemista con el rey Alfonso. Mira cómo recoge lo sucedido este romance:

En Santa Gadea de Burgos, do juran los hijosdalgo,
allí le toma la jura el Cid al rey castellano.
Las juras eran tan fuertes que al buen rey ponen espanto;
sobre un cerrojo de hierro y una ballesta de palo:

—Villanos mátente, Alfonso, villanos, que no hidalgos,
de las Asturias de Oviedo, que no sean Castellanos;
mátente con aguijadas, no con lanzas ni con dardos;
con cuchillos cachicuernos, no con puñales dorados;
abarcas traigan calzadas, que no zapatos con lazo;
capas traigan aguaderas, no de contray ni frisado;
con camisones de estopa, no de holanda ni labrados;
vengan cabalgando en burras, que no en mulas ni en caballos;
frenos traigan de cordel, que no cueros fogueados.
Mátente por las aradas, que no en villas ni en poblado;
sáquente el corazón vivo por el siniestro costado;
si no dijeres la verdad de lo que eres preguntando,
si fuiste ni consentiste en la muerte de tu hermano.—

Jurado había el rey que en tal nunca se ha hallado,
pero allí hablara el rey malamente y enojado:

—Muy mal me conjuras, Cid, Cid, muy mal me has conjurado;
mas hoy me tomas la jura, luego besarme has la mano.

—Por besar mano de rey no me tengo por honrado,
porque la besó mi padre me tengo por afrentado.

—Vete de mis tierras, Cid, mal caballero probado,
y no vengas más a ellas desde este día en un año.

—Pláceme, dijo el buen Cid, pláceme, dijo, de grado,
tú me destierras por uno, yo me destierro por cuatro.—

Ya se parte el buen Cid, sin al rey besar la mano,
con trescientos caballeros, todos eran hijosdalgo,
todos son hombres mancebos, ninguno no había cano;
todos llevan lanza en puño y el hierro acicalado,
y llevan sendas adargas, con borlas de colorado;
mas no le faltó al buen Cid adonde asentar su campo.

Vamos a profundizar en la figura de este legendario héroe del más famoso cantar de gesta en castellano. Empezaremos con una biografía resumida del Cid, que puedes ver en esta presentación:






Si quieres conocer más detalles de su biografía, escucha este archivo de audio.






Enlaces de interés:
Aquí tienes una imagen del manuscrito original (para ver la imagen ampliada, pincha sobre ella) :


No te pierdas estos vídeos:

Camino del Cid




El CID (I)



Mira también estos vídeos: segunda y tercera parte.

Y por último, aquí tienes cómo hacer un retrato moral del personaje.

6 comentarios:

Marta Anula dijo...

La pequeña historia que nos has ofrecido del Cid, me parece muy interesante. Me ha gustado sobre todo, su infancia, y la última batalla. El manuscrito esta muy curioso. Gracias Carmen.

Maria Freitas dijo...

Pienso que este apartado esta muy curioso, y lo recomiendo a todos los jóvenes. Me gusto mucho la infancia de este hombre y las batallas, principalmete la última.
Un saludo y gracias a la profesora por este apartado.

Daniel Oliveira dijo...

Me ha gustado mucho aprender algo más sobre el Cid. Me ha gustado mucho este apartado y se lo recomiendo a todos.

joao dijo...

En el texto de apertura, se noto mucho que Cid era un hombre que no temia al rey, y le confrontaba como si fuera una persona sin ningún cargo importante. Eso me demonstró que El Cid era un hombre muy valiente y con poder, ya que tenía hidalgos en su posesión.
Tambíen noté, que el rey tenía un poco de miedo, porque no le dió una pena muy grande si no solo le ordenó que saliera de su reino.

António Pedro Valério dijo...

Este apartado está muy curioso e interesante, ya que nos habla del Cid, un hombre que es un modelo del ser humano.

Elena Espejo dijo...

Este texto esta muy interesante, nos habla del Cid y su vida en si. Esta bastante bien. Gracias!